Dicen que si no estás en Linkedin no existes. ¿quién está de acuerdo?
Esta red social ha revolucionado el mundo profesional y se ha convertido en la mejor forma de establecer relaciones profesionales, reclutar talento o potenciar marcas.
Así que hoy hablamos de las principales ventajas de esta red social. Y para que no peques de ingenuo también te contamos las desventajas, aunque desde ya te adelantamos que merece la pena estar en Linkedin.
Tabla de contenidos
Las ventajas de LinkedIn
Visibilidad
Tener un perfil bien completado en LinkedIn te permite mostrar tu CV online a más de 722 millones de usuarios, con lo que aumentarás significativamente las posibilidades de que las empresas y reclutadores te descubran.
Si quieres conseguir empleo es fundamental estar en la red profesional más grande del mundo.
Puedes encontrar una gran cantidad de anuncios de empleo
Como hemos dicho, si los reclutadores y las empresas están en Linkedin, tú también deberías estar.
Así podrás enterarte cuando publiquen alguna vacante, o seguir noticias y tendencias de tu sector.
Además también si te unes a grupos de empleo, accederás a otras muchas oportunidades, noticias y ofertas de trabajo que no aparecen en el buscador de LinkedIn.
Tienes una gran cantidad de grupos por país o profesión, lo único que tienes que hacer es enviar una solicitud para pertenecer a ellos.
Oportunidades de Networking
Construir relaciones con otros profesionales te ayudará en tu carrera, tengas o no tengas trabajo actualmente.
¿A qué estás esperando?
Al principio es importante empezar a crear una gran red de contactos, ya que tener muchos contactos en LinkedIn tiene muchos beneficios: te mostrará más en los resultados de búsqueda de los empleadores, te dejará ver más perfiles, y te “venderás” mejor.
Así que empieza por las personas de tu colegio o trabajos previos y vete creando más vínculos para hacer contactos de valor, añadiendo gente que te aporte conocimientos o valor añadido: empleadores, reclutadores, personas que trabajen en tus empresas favoritas, los líderes en tu sector y si ves a una persona que puede ser interesante para tu objetivo, agrégala.
Por último, también puedes participar en grupos según tus intereses, o participar en debates y preguntas online con otros profesionales. Aprovéchalos para conocer a más profesionales de tu sector, y que te conozcan, y consigue más oportunidades de trabajo.
Desarrollar tu marca personal
Otro punto clave para encontrar trabajo o ascender en tu carrera profesional es trabajar tu propio marketing.
Es lo que se conoce como personal branding y te aseguro que con un buen perfil de LinkedIn le darás un boost a tu carrera.
No se trata de mentir en tu currículum, sino de generar confianza, credibilidad y demostrar profesionalidad.
Diferénciate con un perfil optimizado, una buena foto, consigue recomendaciones y aporta contenido de valor, ya verás cómo te ayuda a que los seleccionadores se fijen en ti.
Atraer empleo sin buscarlo
Así como lo lees.
No, no es magia, ni tampoco va a pasar de un día para otro.
Para que esto suceda primero tendrás que trabajar tu marca, no va a ser “llegar y besar el santo” ¿no?
No vale solo con abrir la cuenta, después tienes que hacerte visible.
¿Y cómo te haces visible?
- Teniendo un perfil completo y bien armado.
- Interactuando con tus contactos
- Compartiendo contenido, que demuestre que eres un experto en lo que haces.
Así tendrás más oportunidades de aparecer en los primeros puestos en el buscador y pronto te empezarán a llamar aunque no hayas aplicado.
Publicar y mostrar tu trabajo para demostrar tu conocimiento
Aquí no funciona tener el perfil incompleto.
En LinkedIn puedes y debes demostrar lo que sabes.
Es un escaparate perfecto.
Aprovecha a publicar artículos, comparte archivos multimedia u otros documentos y demostrarás tu expertise.
Te ayudarán a posicionarte, hacerte más visible y a conseguir tu objetivo.
Obtener recomendaciones de nuestros contactos
Las recomendaciones son muy valiosas para tu reputación y desde tu perfil puedes enviar una solicitud a tus contactos para pedir que te recomienden.
Pero no te pases, con un par vale.
Mejor dos recomendaciones que impresionen y te avalen, que veinte de tus familiares y amigos que no aporten nada.
El consejo es que pidas recomendaciones a tus antiguos compañeros de trabajo, jefes, coordinadores, o tus compañeros de clase o profesores.
Y ojo con caer en el juego de: “te recomiendo y me recomiendas”, sin tener la más remota idea de lo cualificado que está el otro.
Aunque obviamente es necesario dar recomendaciones, elige bien a quién estás recomendando.
Las desventajas de LinkedIn
El spam
A pesar de ser una red de profesionales, lo cierto es que siempre hay personas que no lo son tanto y hacen mal uso de esta red, pero no es la regla.
Por spam me refiero a gente que se quiere aprovechar de esta red para vender algo por InMail o realizar publicaciones de ventas en grupos , cuyo verdadero fin es compartir conocimiento y crear relaciones.
Requiere tiempo y esfuerzo
Esto no es un portal de empleo, donde únicamente subes tu CV y solicitas una vacante. Es una red viva y cambiante.
Requiere que realmente le dediques tiempo y esfuerzo:
- Trabajar tu marca personal para hacerte atractivo a los reclutadores y gerentes de organizaciones.
- Seleccionar inteligentemente tu red de contactos
- Darte a conocer.
- Publicar contenido, compartir noticias y novedades de tu sector
- comentar a otros, recomendar, validar, actualizarte…
Así que poco a poco y con paciencia.
Algunos beneficios son de pago
Aunque con la versión gratuita ya tienes bastante, existen algunas ventajas de la versión Premium de pago.
- Puedes enviar y recibir inMail de cualquier persona, aunque no sea contacto tuyo.
- Ver quién ha visto tu perfil y te muestra el historial completo a diferencia de la versión gratuita.
- Tienes acceso a la plataforma educativa.
Existen otros beneficios, pero no todos son necesarios para tu búsqueda de empleo.
Son más útiles para los reclutadores o quienes buscan hacer negocios.
Así que lo que puedes hacer es intentar sacarle el máximo partido a la versión gratuita y después usar el mes de prueba gratis de la versión Premium, para que tú mismo hagas la valoración de si te interesa o no.
Tus datos personales pueden estar expuestos a terceros
Poner mucha información sobre ti puede ser peligroso: robo de identidad, usuarios falsos, ofertas de empleo falsas y estafas.
Aunque puedes denunciar este tipo de perfiles o bloquearlos no dejan de ser molestos o incluso peligrosos.
Toda la información que pongas en tu perfil puede ser vista por otros.
Así que ten cuidado con la información que compartes y la configuración de privacidad.
No es útil para perfiles de baja cualificación
Hay quien dice que los perfiles presentes en LinkedIn son de alta cualificación, y pensarás: ¿pero no se supone que todo el mundo está en LinkedIn?
Pues de momento no.
La mayoría de las personas que forman parte de esta comunidad son profesionales con alta cualificación: directivos y mandos intermedios, por eso también la mayoría de las empresas también usan esta herramienta para reclutar este tipo de perfil.
Pero ¿entonces significa que LinkedIn no sirve para usuarios con baja cualificación, que no poseen casi ninguna formación, o los que llevan tiempo en paro?
No, no te preocupes, que tampoco es eso, cada vez hay más perfiles de este tipo y cada vez habrá más oportunidades.
Sólo tienes que tener paciencia y seguir activo en tu búsqueda: enviar autocandidaturas, chequear portales de empleo, las web de las empresas que te interesan…
Posibilidad de ser difamado
Lamentablemente Linkedin no controla el contenido de lo que comentan los usuarios, así lo expresan en su sitio web, lo que da la posibilidad de que alguien pueda difamarte.
Puedes presentar una queja, donde deberás presentar pruebas y explicar por qué el contenido daña tu reputación, para que dicho contenido sea eliminado. Pero te recomiendan solucionarlo tú directamente con la persona en cuestión para que lo elimine.
Conclusión
Como te habrás dado cuenta, estar en LinkedIn tiene muchas más ventajas que desventajas, por lo que sí o sí tienes que estar.
No tienes nada de qué preocuparte. Es más, deja de preocuparte y empieza a ocuparte. ¡Ponte manos a la obra ya!
